"Stellet Licht" (Luz Silenciosa) de Carlos Reygadas es lo que desde mi punto de vista he considerado simplemente como CINE, entiendasé algo mas allá de la rimbombante etiqueta de "arte cinematográfico". Mi concepción de CINE, asi en estado puro, lo dejaré para otra ocasión. Mejor dejo este espacio para mi impresión acerca de este, ahora sí, -Film- y no -movie- o -pelí- como dirián por ahi algunos conocidos.
El poder ser testigo de la trayectoria de lo que para mí ya es uno de los pocos y verdaderos "Auteurs" del cine actual, mas allá de lo que diga la teoría cinematográfica contemporánea acerca de la muerte del cine de autor.
En "Japón" pude ver aquella concepción del hombre en estado limite al simplemente dejarse llevar por el deseo de morir no sin antes dejar su pulso sexual en un viaje que a la manera de Tarkovsky, realiza una especie de sacrificio de modo muy ambiguo, dejando ver aquella particularidad de Reygadas dentro de lo que conocemos como "Cine Méxicano".
En "Batalla en el Cielo" pude ver como aquel estado límite se transformaba dentro del violento ambiente de la Ciudad de México, tan única y al mismo tiempo tan violenta como todas las ciudades. Esta vez la busqueda de una redención dentro de ese ambiente se transformaba en un via crucis que a la manera de Buñuel se volvía en contra de su protagonista al ritmo de los tambores de la peregrinación religiosa en busca de aquella redención que se encuentra quizas dentro de otro pulso sexual y en un mas allá que quiza no existe.
Ahora en "Stellet Licht" Reygadas nos hace recordar en una sola pelicula, la simple belleza de la luz, la simple observación de la imagen y el sonido de un amanecer y un crepúsculo, el pensamiento, el lenguaje y la vida de aquella comunidad que nos parece tan lejana. Pero también existe aquel estado limite en donde el protagonista se ve envuelto. La infidelidad y al mismo tiempo la importancia del llamado "amor duradero" dentro de un ambiente de aparente simpleza y austeridad en donde aparentemente aquella división entre el alma y el deseo esta superada. La armonía de ese universo parece estar en peligro, pero ahora el concepto metáfisico del milagro, lo que quizas sea esa la luz silenciosa del titulo, nos envuelve dentro de esas habitaciones de colores uniformes.
En "Stellet Licht" podemos ver el recuerdo de Dreyer, el final milagroso de su "Ordet" que pasa por el homenaje de Lars von Trier en "Breaking the waves", llevando incluso a pensar en "Luz Silenciosa" como la primera pelicula de estilo nordico hecha en nuestro país, mas allá del reconocimiento de sus claras influencias, de hecho puedo incluso reconocer en ciertos momentos a Bergman y recordar el rostro de Liv Ullmann en aquellas actrices no profesionales de la comunidad menonita en México.
Al finalizar la pélicula en la sala donde me encontraba, una mujer pronuncio aquella frase contundente que al mismo tiempo significa nada y mucho para el quién la pronuncia: "¡Que mierda de pélicula!".
¿Esto será prueba de la maravilla que es "Stellet Licht"?
Como me gusta decir, eso solo el tiempo le dará la razón.
